Podemos poner un árbol sin darle mayor importancia o tener un elemento decorativo, nosotros tenemos claro que un árbol puede convertirse en una escultura, un estilo de arte que nos transmitirá paz, sofisticación, decoración... Todo depende del diseño de nuestro árbol y el recipiente en el que lo tengamos. Puedes consultar nuestra selección de ideas para macetas.
Tomate tu tiempo para decidir el tipo de maceta ideal para ti y el estilo buscado. Lo primero que debes tener en cuenta es el material de fabricación. Veamos una clasificación:
- Cerámica
Las macetas de cerámica o barro pueden ser clásicas, clásicas pintadas, con diseños modernos o divertidos. En la foto del ejemplo podemos ver una maceta de cerámica con forma y diseño de barril. Ahora hay diseños increíbles para cualquier tipo de decoración esperando ser encontrados
Suelen ser de las más caras, pero tienen la ventaja de que protegen muy eficazmente las raíces de nuestros árboles. Durante el verano, cuando están húmedas, protegen la tierra de coger una temperatura excesiva que pueda ser peligrosa para la raíz de nuestro árbol y en invierno protegen mejor que las de plástico el descenso de la temperatura.
Sus desventajas es que son más pesadas que las de plástico, pueden estropearse o ponerse feas si no están vidriadas o esmaltadas y como dijimos anteriormente suelen ser más caras.
- Plástico y derivados
Generalmente y salvo excepciones son las más ligeras y económicas. Puedes encontrarlas de multitud de tamaños, formas y diseños a un precio muy ajustados.
En la foto del ejemplo, encontramos un modelo de maceta de plástico imitando una maceta de barro decorativa. La maceta, además, incluye en su interior una pequeña cámara de aire que aísla las plantas que le ayuda incluso, para aparentar que tiene el grosor de una maceta de terracota real.
Su desventaja es que protegen muy mal del calor o el frío salvo aquellos modelos que incluyen una cámara de aire o aislante en su interior para proteger nuestras plantas. Las que son de tipos de plástico de calidad o con un diseño muy moderno pueden llegar a ser más caras que las de cerámica.
- Piedra, hormigón y similares
Si no tienes que preocuparte por el peso ni por estar moviendo las plantas estas macetas son perfectas para ti. Puedes encontrar diseños clásicos, modernos, extraños... Hay multitud de tipos de maceta dentro de esta categoría que se adaptan a cualquier tipo de decoración.
Además, si no encuentras una de tu agrado, siempre puedes diseñar tu propio modelo creando pequeños moldes con los que después de rellenar con masa de cemento fresca conseguirás una maceta única.
Son las más resistentes de todas, protegiendo a los árboles de manera similar a las de cerámica, pero preparadas para durar toda una vida.
Como desventajas son las que tienen un precio más elevado y además un peso muy grande, solo siendo recomendables para colocar en un patio o jardín.
Una vez conocida la clasificación, antes de elegir tu maceta, solo debes tener en cuenta estos detalles:
- Un árbol está acostumbrado a vivir en tierra aunque puede adaptarse a vivir en maceta.
- Es recomendable ir poniéndole una maceta un poco mayor cada 2 o 3 años o en el caso de ser ya la definitiva, sacar el árbol cada 3-4 años e ir recortando las raíces un poco en función del tamaño para evitar que se enreden y acaben asfixiando al árbol con la misma técnica que para cualquier otra planta de nuestra terraza.
- Si el árbol se plantó desde joven en una maceta grande no será necesario recortar las raíces hasta que no lleve 2-3 años con una copa de al menos el tamaño de nuestra maceta, ya que las raíces suelen tener la misma distancia que la copa.
- Lo ideal es utilizar una maceta de 30 a 50 cm de diámetro con una altura similar, para árboles de 1.5-2 metros, no obstante, todo dependerá del tamaño máximo que queremos darle al árbol, pudiendo mantenerlos en macetas mucho más pequeñas si son árboles de pequeño porte.
Recordamos nuevamente que hay que tener en cuenta el peso máximo que aguanta el forjado de nuestra terraza (o habitación si es en interior) y el peso total que puede alcanzar la maceta con la tierra humeda y el árbol con frutos. Consultar al administrador, al presidente del edificio o a un arquitecto si se desconocen las cifras. Nosotros no podemos asesorarles sobre su caso particular.